¿Porqué son importante las fuentes fiables?

Gracias a Internet, el conocimiento se comparte en el mundo de manera global. 

Con una simple búsqueda en páginas web especializadas, foros y páginas como https://es.wikipedia.org/ podemos encontrar información sobre prácticamente cualquier tema. Pero el gran número de usuarios de Internet y la presencia de la publicidad han traído consigo un nuevo problema: un exceso o sobrecarga de información que, a menudo, hace difícil localizar, seleccionar, analizar, clasificar o incluso comprender la información que nos interesa y nos es útil. 

Los expertos utilizan un término de nueva creación para referirse a este fenómeno: la infoxicación, o intoxicación informativa, expresión que pone de manifiesto las consecuencias negativas que conlleva la abundancia de información. La fiabilidad de la información La inmediatez con que encontramos información en Internet es sorprendente, pero su fiabilidad no es siempre la que cabría esperar. 

En ocasiones, la información que encontramos en internet es errónea, inútil o incompleta; puede haber sido malentendida por el autor o no haber sido revisada. Incluso se dan casos en los que intencionadamente se publica contenido falso para generar confusión y despistar a la comunidad de internautas. Por ello es indispensable no solo aprender a buscar en internet, sino a seleccionar qué información es verosímil y a elegir fuentes que garanticen fiabilidad.

Por esta razón no podemos dejar de lado los soportes tradicionales de información: diccionarios, enciclopedias, revistas científicas, libros de texto... Cualquier información publicada en estos medios ha sido revisada por expertos, lo que los convierte en fuentes de información de máxima fiabilidad para nuestros trabajos.

Elementos que garantizan fiabilidad 

Existen elementos cuya presencia nos permite valorar la fiabilidad de la información encontrada en una búsqueda en Internet: 

•  Autoría. Indicación de quién escribe la información o de la fuente de donde proviene. Igualmente, en el caso de publicaciones on-line, que aparezca el nombre de un editor o empresa editorial, conocidos y de prestigio, asegura la fiabilidad del contenido. Por ejemplo, parte de esta información está adquirida de la Junta de Andalucía. 
•  Actualización. La fecha de la última actualización o revisión del texto informativo. Cuanto más reciente sea esta fecha, la información será más fiable. 
•  Diseño. Una página web con un buen diseño suele indicar que se da valor tanto a su información como a la manera en que esta se presenta. 
•  Objetividad. Las páginas web que carecen de publicidad y presentan su información de manera clara, como ocurre en el caso de los sitios de carácter oficial, académico, científico…, suelen incorporar información precisa y veraz. 
• Acceso. Algunos dominios son más fiables que otros. Por ejemplo, los dominios del tipo .es, .com y .org son genéricos pero más fiables que otros dominios como .tk o .shop. Los dominios propios de entidades gubernamentales, como por ejemplo .gob.es o .gov, ofrecen contenidos de la más alta fiabilidad. Aquí explican consejos para saber si un dominio es fiable.